Teqroo: MAS o menos
Hace una semana, en este mismo espacio, planteamos que el Tribunal Electoral de Quintana Roo...
Hace una semana, en este mismo espacio, planteamos que el Tribunal Electoral de Quintana Roo (Teqroo) votó devolverle el registro al Más Apoyo Social (MAS), que no alcanzó el 3% de los votos el 2 de junio (pero sí cerca de un 8% en 2022, en las elecciones de gubernatura). El porcentaje ha sido pura interpretación de ley.
En respuesta, se supo que PAN, PRI y PVEM impugnaron la decisión del Teqroo, con lo cual el asunto del partido político local se litigará en la Sala Superior Xalapa, e incluso, podría terminar en la Sala Superior, cuyos fallos son inapelables.
El que reclama, suele estar motivado con llegar hasta las últimas consecuencias, a menos de que reciba instrucciones en otro sentido; es decir, podríamos presenciar un desenlace en la última instancia comicial. Habrá que esperar los razonamientos y, sobre todo, las sentencias al respecto. El caso del MAS (una especie de franquicia de “Pepe” Monroy) justamente reabre el debate sobre el dichoso 3% de la votación válida emitida. Tienen trabajo en las legislaturas y en las instancias arbitrales para ocupar los supuestos vacíos en la ley. Se abre, con aquel debate, una “caja de pandora”: ¿cuándo sí aplica el 3%? ¿Por qué otros partidos como el PRD aluden algo distinto? Son diversos los cuestionamientos.
El Teqroo del magistrado Sergio Avilés Demeneghi ha estado en el “ojo del huracán” en los últimos días. Se recuerda, por ejemplo, lo que pasó con Kira Iris y su regiduría en Solidaridad, o con Francisco Puc, “Xiximak”, en José María Morelos, por un escándalo de 2022, revivido recientemente. Declararse “incompetente” en este último expediente levantó las sospechas. En fin, ambos temas son polémicos, más allá de a qué parte le asiste la razón jurídica.
No es primera vez que el Teqroo pasa por la sospecha y la crítica. Un Tribunal que emite tales sentencias siempre estará sujeto al escrutinio, porque es imposible satisfacer a todas las expresiones en la veleidosa política, aunque deberá revisar con lupa sus criterios y ajustarse a lo que dicta la lógica del poder.
Desorbitado
Conviene observar minuciosamente lo que pasa en el Partido Verde, donde dos líderes municipales renunciaron recientemente por inconformidades. En José María Morelos y Lázaro Cárdenas se da rienda suelta a las conjeturas con miras al 2027, año de grandes elecciones. Para seguir la pista y atar cabos sueltos.